¡Cu-cú! en la granja y ¡Cu-cú! en la selva: Para los más peques de la casa, aprenden vocabulario, trabajan motricidad fina buscando qué animal está escondido. Además, al tener páginas duras, son mucho más resistentes.
Colección de Mercer Mayer: Son libros que no tienen nada escrito, solo aparece el cuento dibujado. Por lo que son ideales para trabajar la estructura del lenguaje, el diálogo, la imaginación…
Elmer: es una historia entretenida para aquellos peques que están comenzando en la lectoescritura. Es un cuento que educa en la diversidad de una forma divertida.
El árbol de los recuerdos: una tierna historia, adaptada a diferentes edades, que ayuda a comprender y superar la pérdida de alguien cercano.
¡Ayúdale a despegar!: libro indicado para padres que quieren comprender mejor a sus hijos y quieren darles un apoyo extra en su desarrollo.
Colección menstruita: libros que explican y normalizan los cambios que sufre el cuerpo para establecer una relación sana con él, de cara a la adolescencia.
4 historias para manejar las emociones: cuatro historias para explicar a los más pequeños de la casa, desde el humor y la fantasía, las emociones y trucos para manejarlas.
Topito terremoto: libro que realiza una explicación adaptada del TDAH y cómo aprender a manejar la hiperactividad sin prejuicios.
El emocionómetro del inspector Drilo: hace un análisis de las emociones para identificarlas y gestionarlas de una forma divertida, en la que los niños podrán ser detectives de emociones.
María y yo: libro que explica, desde la perspectiva de un padre, la relación con su hija y la curiosa forma de ver y entender el mundo, haciendo a los lectores partícipes a través de los dibujos.